MONUMENTO UNIVERSAL A LA VENDIMIA.

La ciudad de Requena, en la Comunidad Valenciana, que ha sabido conjugar sus raíces históricas con el arte y la modernidad, erigió en 1972 el Monumento Universal a la Vendimia, como emblema de su más representativa riqueza y actividad, la vitivinicultura, y de su Fiesta de la Vendimia, la más antigua de España, declarada de interés turístico en 1966, y que en este año 1997 conmemora su cincuenta edición y consecuentemente sus Bodas de Oro. La filatelia se suma a estas Bodas de Oro con la emisión de un sello en el que figura dicho Monumento, que fue reconocido por la O.I.V. (Oficina Internacional del Vino), con sede en París, como universal, por ser el único que sobre este antiquísimo trabajo agrícola existe en el mundo. La ciudad de Requena, que alberga también históricas y artísticas iglesias, palacetes, cavas y barrios medievales, levantó este significativo Monumento gracias al tesón y empeño de sus gentes y diversos estamentos locales, comunitarios y estatales. Requena, que posee históricamente los títulos de Muy Noble, Muy Leal y Fidelísima Ciudad, obtuvo en 1987 otra preciada dignidad y titulación concedida por la O.I.V., “Ciudad Internacional de la Viña y el Vino”, gracias, además de su genuina dedicación vitivinícola, a haber alzado, en artística manifestación arquitectónica de esbelta y armónica traza, su Monumento Universal a la Vendimia, de 18 mts. de altura, construido en piedra noble y bronce. El Monumento Universal a la Vendimia adquiere vivencias especiales cuando, en surtidor inagotable, en los tradicionales festejos vendimiales, mana por su fuente los tintos y rosados vinos de la tierra, para pública, generosa y gratuita degustación. Un sello para un Monumento único de una Fiesta singular en una celebración especial.