Fecha de emisión: 21 oct, 2004

NATURALEZA 2004

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NATURALEZA 2004

HISTORIA

Las Islas Cíes (Vigo), el Parc Natural del Delta de l'Ebre (Tarragona) y el 50 Aniversario del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente (Isla de La Palma) son los lugares que aparecen este año en la serie dedicada a la Naturaleza .

El archipiélago de las Cíes, situado en la entrada de la Ría de Vigo, está formado por las islas de Monte Agudo o isla del Norte, Monte Faro o isla del Centro y San Martiño o isla del Sur, además de algunos pequeños islotes. Esta área geográfica de más de 3.000 hectáreas, de las que solamente 433 hectáreas forman la parte terrestre, fue declarada en el año 2002 Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las islas Atlánticas de Galicia. Las Cíes están deshabitadas y sus fondos marinos son extraordinariamente ricos en flora y fauna. A su belleza natural se unen un clima cálido, con escasas precipitaciones, y una situación geográfica que han favorecido el establecimiento de numerosas colonias de aves marinas. En abril de este año han sido incluidas en las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA).

El Delta de l'Ebre constituye la zona húmeda más extensa de Cataluña y la segunda de España, después del Parque Nacional de Doñana. De esta extensa llanura de unas 32.000 hectáreas, cerca de 8.000 están dedicadas al Parc Natural, que se sitúa al sur de Tarragona, entre las comarcas del Montsiá (margen derecho) y del Baix Ebre (margen izquierdo). Lugar de gran valor ecológico para las aves, como área de cría y como zona de invernada, reposo y alimentación en los periodos migratorios, se han llegado a contar más de 350 especies diferentes. En el Delta se cultivan diferentes productos hortícolas, frutales y, sobre todo, extensos arrozales. Para hacer compatibles los valores ecológicos y los intereses agrícolas, la Generalitat creó, por decreto de 1983, ratificado y ampliado en 1986, el Parc Natural del Delta de l'Ebre.

La Caldera de Taburiente (isla de La Palma) fue declarada Parque Nacional en 1954. Con 4.690 hectáreas de superficie, su abrupto paisaje, fruto de erupciones volcánicas, deslizamientos de tierras y de la fuerte erosión del agua y del viento, cobija una gran variedad de especies vegetales y animales, muchas de ellas en peligro de extinción. Sus recursos naturales han atraído, desde siempre, a geólogos y botánicos para la realización de estudios específicos sobre geología, flora y fauna. El parque, además de ser zona de conservación y de protección de numerosas especies, sirve de espacio de formación para el público general.